sábado, 8 de mayo de 2010

Lo que piensa un padre



En las últimas horas nos han comentado que Jesús tiene un problemilla con un coducto circulatorio, pero ya le están medicando para solucionarlo y se le vé muy tranquilo y estable.

Todos conocéis la historia de chico conoce chica... y descubre que su vida no tiene sentido si no es para compartirla con ella.

Lo que he vivido con María durante estos casi cuatro años de matrimonio no me había imaginado ni que existiera. Sabía, por lo que había visto en casa desde pequeño, que un matrimonio luchado día a día era algo maravilloso, pero nunca había soñado que tanto.


La llegada de Fernando y María Isabel, y la noticia de que un nuevo hijo crecía dentro de María, no han hecho más que llenar de alegría nuestro hogar.

El domingo que nació Jesús todo eso estaba en el aire: En la misma sala del ecógrafo donde había visto a mis tres hijos por primera vez, Irene nos explicaba la situación y, por un momento, pensé que nos iba a plantear la elección en la que jamás quiero tener que participar: María o el "peque".
Gracias a Dios, la elección era sencilla: "El niño dentro no tiene opciones." "¿Y fuera?" Silencio. Una mirada de medio segundo con María que no podía hablar: "¡Pues fuera!"

A partir de ese momento, esa vida de sonrisas, preocupaciones, alguna discusión y más sonrisas, preocupaciones y discusiones, desapareció de pronto. A María le iban a practicar una cesárea de urgencia, Fernando estaba con un amigo, María Isabel con los vecinos y sus hijas, "el peque", "el hermanito que está en la tripa de Mamá", tenía que afrontar una batalla a vida o muerte y yo, su padre, no podía hacer nada por ninguno de ellos, o casi.

Una breve conversación con mi Padre y otra un poco más larga con mi padre (al final siempre acudimos dónde sabemos que nos van a ayudar) y adelante: Con María todo el tiempo que pudiera y asegurarnos de que al niño le iban a bautizar nada más nacer. Lo demás que espere.

Apareció por allí un amigo que venía a visitarnos y del que os hablaré en otra ocasión. El Jefe aprieta pero no ahoga...

Cuando María entró en el quirófano estaba asustada. Yo más, pero ella no debía notarlo. Según desaparecí de su vista, procurando hablar despacio y sonriendo, llamé a los amigos que cuidaban de Fernando y María Isabel, que enseguida se hicieron cargo de la situación, a la familia y a los amigos que más gente podían poner a rezar, y volví a quedarme sin nada que hacer, o casi.

Como la previsión era que la cesárea iba a tardar, bajé a fumar un cigarro y a la Capilla del Hospital, y allí, rogando al Médico que más sabe y es el Padre que más quiere a mi hijo, pasaron frente a mí todos los pecados de mi vida pasada, todos los momentos de pereza y egoismo durante este embarazo, todas mis faltas de paciencia y delicadeza con María... Estaba repitiendo "gracias, perdona y ayudamé más" cuando giré la cabeza y ví la foto de esta entrada: "San José, tú ¿qué **** harías?"

Así que salí de allí con la convicción de que yo era "la cabeza pensante" de la familia mientras María no pudiera hacerlo con claridad, y que pasara lo que pasara, no tenía derecho a dejarme llevar por los sentimientos. Mi familia estaba en manos de Dios, como siempre lo ha estado y lo estará, y yo estaba allí para aceptar, agradecer y ayudarles a aceptar y agradecer lo que Él decidiera.

Volví a la 5ª Planta. Hablé con el anestesista que me dijo que todo había ido bien, mi hijo había llegado mientras yo estaba rezando y enseguida pude acompañarle a Neonatología. ¡Tan pequeño que apenas se le veía algo con los tubos! Ni me atreví a tocar la incubadora, pero el pediatra me dijo enseguida que estaba mejor de lo que esperaban y que volviera en una hora.

Bajé de nuevo justo a tiempo de ver salir a María camino de la URPA, riéndose. ¿Cómo no?, es María...

Luego agradecí unos segundos a la matrona el Bautismo y conocí el nombre de mi hijo Jesús. Irene me dió más detalles: "Todo ha ido mejor de lo que esperábamos. María ha sido una valiente".

Esa noche, Jesús, María y yo dormimos en el hospital y Fernando y María Isabel con sus tíos María y Rubén... ¡Ya era padre de nuevo!

Hay dos cosas que me rondan la cabeza desde entonces: Sé que las cosas no suceden por casualidad y que todo es para bien ¿Cómo puedo ayudar a que salga bien de todo ésto? Y la segunda: ¿Qué he hecho yo para merecer tanto?

Mañana tenemos la Primera Comunión de una prima de Jesús. Que paséis un buen fin de semana.

18 comentarios:

Nekane dijo...

Fernando eres una persona maravillosa y ya verás como a tu bebé pronto te lo llevas a casa.
Le doy gracias a Dios por haberos conocido.
Un beso y animo.

Itzi dijo...

Sois.... No tengo palabras ¡Gracias por vuestra amistad! Con personas así, podemos ser mejores y hacer un mundo mejor.
Bsss y rzs empezamos la tercera semana ¡Animo! Itzi.

Unknown dijo...

Fernando, de todo esto ya está saliendo mucho bien, ¿o es que no has leído los comentarios? Nos tenéis a muchísima gente rezando por Jesús, por sus padres, sus hermanos y sus "amigos de planta"... el mero hecho de conseguir poner a tanta gente a rezar ya es un logro... y sobretodo un bien muy grande.

Lo que has hecho para merecer esto es poner a tu familia en manos de Dios, eso que tan básico nos parece a los que lo tenemos claro, es algo que a mucha gente le asusta, incluso siendo católicos practicantes, les da miedo abandonarse en las manos de Dios.

Mucho ánimo, no desfallezcáis, tenéis a muchísima gente detrás vuestra rezando, piensa en lo bonito que será el día que Jesús aprenda a leer que lea este blog que se escribió cuando él tan solo tenía unos días... es un chico muy especial, un abrazo muy fuerte desde Cádiz

Begoña

eligelavida dijo...

Hola Fernando y María; Acabo de conocer vuestro blog. Os encomiendo, a vosotros y al pequeño Jesús. Mucho ánimo y no dejéis de contarnos como va todo.

Voy a leer las entradas antiguas para enterarme de todo. Un abrazo!

Fernando de Pablo dijo...

Hola primo, soy tu tocayo Fernando de Pablo (de tu tío Paco). Marigé nos ha pasado el enlace al blog y acabamos de leerlo. Os mandamos un abrazo enorme y contad con nuestra oración. Seguro que desde el cielo tenéis a mucha gente pendiente de Jesús. Ánimo chicos, que habéis traído a un valiente al mundo! Un abrazo de corazón. Fernando y Miren

Anónimo dijo...

Desde Los Esatdos Unidos estamos rezando por su bebe y por toda su familia. Que Dios los bendiga. Pax Christi.

Toñi dijo...

Os voy siguiendo. María, Fernando, tenéis la oraciones de todos.

Anónimo dijo...

¡gracias por vuestra generosidad! buscar sacar el mayor bien posible de esta situación tan dura para vosotros es ejemplar para todos. seguimos de lejos y de cerca.
abrazos
Bego (Murcia)

reyna del c. dijo...

Realmente os admiro muchísimo.
Una amiga me acaba de mandar el enlace de vuestro blog y ya me he leído todas las entradas.

Os felicito por el nacimiento de vuestro tercer hijo y por la increíble fe que demostráis.
Sobretodo admiro lo que Fernando tantas veces repite (que se ha Su voluntad, y no la mía).
:)

Angelo dijo...

Precioso relato. Muy parecido a lo que viví hace 17 años en una UCI.Te he constestado en mi blog a tu cortesía . Por favor no te sientas obligado a contestar. Sé el trabajo que lleva. Tú a contarnos y nosotros a unirnos en la oración.
Un abrazo. Gracias de nuevo.

Kelkilla dijo...

En primer lugar mandaros un gran abrazo de ánimo y deciros que también rezo por vosotros y por el pequeño Jesús.
Mi marido y yo esperamos a nuestro primer hijo, que si Dios quiere, nacerá en 2meses, y nos ha tocado mucho vuestra historia.
Comprendo lo que estais pasando, hace 9 meses le hcieron una cesarea de urgencia mi mejor amiga. La pequeña pesó 800gramos y yo lo viví muy de cerca. Hoy pesa mas de 7 kilos, está preciosa! y todo gracias a los rezos de mucha gente, al igual que pasa con vuestro pequeño Jesús.
Confiad en Dios, él siempre lo hace todo bien y es el único que nos ayuda realmente en estos casos.
Mucho ánimo, seguiremos rezando para que Jesús crezca y pronto pueda estar en casa con sus hermanitos.
Un abrazo

viky dijo...

Muchas veces podemos tener la tentación de pensar que en nuestro camino hay muchas"noches oscuras" como decía San Juan de la Cruz, pero !cuantas veces Nuestro Jefe, que es Listísimo se ha encargado de hacernos ver,- cuando a Él le ha parecido conveniente-, la claridad a la salida del túnel!. "Dios pule la piedra que vale".
Dices: "¿Cómo puedo ayudar a que salga bien de todo ésto? ", pues !ya lo estás haciendo, con el bien y el amor que estáis "derrochando" por el camino.
Un abrazo grande para vosotros y otro más "chiquitito" para Jesús.

María G.Y. dijo...

Como ya os han dicho por aquí es un lujazo conoceros!!!

Jesusillo ha ido a caer en una familia estupenda.

Ánimo, seguimos rezando por todos

Muchos bsss
María

mariana dijo...

Hola Fernando y Maria,habeis hecho todo por vuestros hijos,siempre habeis estado pendientes de que no les falta de nada:comida,educaccion,proteccion.
Cada uno de nosotros tenemos pasado,malo ó bueno.No creo que del Pasado depende el Futuro,pero eso sí el Presente nos enseña a ser vivos y fuertes,en este caso es el pequeño Jesus.Lo quiere decir que no tiene que ver el pasado con lo que suscede ahora.Y como siempre animo y ser felizes.

Altea dijo...

Qué San José más moderno. Cuando leía esto y llegabas a la pregunta que le hiciste, me imaginé a San José contestando: "¡Ánimo! ¡Échale...!"

Anónimo dijo...

Animo admirable familia. Estamos unidos entorno a Jesus.

Un abrazo a Maria, mujer valiente donde las haya.

Unknown dijo...

Es una alegria enorme poder conocer por fin a Jesus. Nos recuerda a cuando nacio Adrián, tambien prematuro. Viendolo ahora reir y corretear todo aquello parece un mal sueño, pero lo cierto es que durante el mes y medio que estuvo Adrian en el hospital aprendimos muchas cosas, la mas importante, que por muy fragil y pequeñas que seas esas personitas tienen una fuerza y unas ganas de vivir enormes, asi que animo que Jesus es de esos, de los luchadores.

Besos de Arlina y Francisco

Unknown dijo...

Pero qué majo es San José... y qué bien haces teniéndolo de modelo. Pídele mucho, Fernando, él tiene "enchufe" directo en el Cielo.

Tu papel como padre de Jesús es fundamental, y lo estás haciendo genial, no podría imaginar un padre mejor para ese chavalín precioso.

Un abrazo enorme...