Hola:
Fernando y María Isabel están todo emocionados porque mañana me darán su regalo del día del padre (o del "padrrrrre" según María Isabel). José, que además celebra su Santo, sigue a lo suyo, babeando y siendo una ricura que dan ganas de comerse.
Así que no he podido evitar pensar en mi padre, y en todos los días del padre que no supe estar a la altura, que fueron unos cuantos.
Mi padre se ganaba la vida durmiendo (a la gente). Lo que nunca he entendido es que no se durmiera él haciéndolo, ya que para sacarnos adelante, durante muchos años lo hacía durante demasiadas horas al día, y con muchas guardias seguidas.
Llegaba a casa y lo primero que hacía era darle un beso a mi madre, y lo segundo, cogernos a todos y jugar un rato con nosotros para que Mamá descansara.
Soy el cuarto de seis, así que sólo tenerme supuso renuncias para mis padres, y encima se siguieron quitando cosas para regalarme dos hermanos más... ¡Qué suerte!
Después no le dejé más remedio, y aún lo hago, que sacar esa "nobleza baturra" que desborda para enderezarme y hacer entrar en mi cabeza un poco de sentido común. Sé que no se lo puse fácil y que no sería un orgulloso padre de familia hoy, si no fuera por sus esfuerzos continuados durante tantos años.
Ahora le dejo a sus nietos, para que los mime todo lo que no nos pudo mimar a nosotros, porque nos quería tanto que se estaba dejando las horas en ganar nuestro sustento, y porque sabía muy bien como educarnos como para malcriarnos. Pero ahora es "el Abuelo", así que tiene barra libre, que para eso se la ha ganado.
Felicidades Papá (y Mamá, que ya sé que para tí ella siempre ha sido lo primero), y muchas gracias por la vida y por enseñarme con tu ejemplo la mejor manera de vivirla.
Buenas noches,
Fer
P.D.: Y Felicidades San José, por supuesto.
domingo, 18 de marzo de 2012
Felicidades Papá
Publicado por Fernando en 21:30
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2 comentarios:
Felicidades para tí y para José!
He leído hoy tus últimos posts, Fer. Son deliciosos. ¡Qué envidia las imágenes de tus hijos! Yo ya he pasado esa etapa, por desgracia.
El que más me ha gustado -me ha emocionado- es el del día del padre. Expresas de maravilla sentimientos universales. Me he sentido totalmente identificado. ¡Cuánto me arrepiento de todas las cosas que hice mal con mis padres, que fueron demasiadas! ¿Cuántas ocasiones perdidas para decirles lo agradecido que les estoy por todo lo que me han dado, y para pedirles perdón! Seguro que desde el Cielo ellos lo entienden todo y me siguen ayudando.
Gracias, Fer, por hacer presentes cosas tan bonitas.
Vicente.
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